Para leer más contenidos de nutriNews Noviembre 2024
Uno de los principales objetivos de la industria porcina en España es aumentar la ganancia magra de los cerdos, manteniendo niveles adecuados de grasa dorsal y grasa intramuscular en la canal.
Factores como la genética y la relación entre energía neta (EN)/proteína bruta (PB) del pienso afectan al rendimiento productivo y a la calidad de la canal y de la carne (Quiniou et al., 1999; Latorre et al., 2003).
En este sentido, un aumento en el contenido de EN del pienso a menudo resulta en una mayor ingesta de energía y una mayor acumulación de grasa en la canal (Cámara et al., 2014).
Por otro lado, los piensos altos en PB se utilizan a menudo para garantizar un suministro adecuado de aminoácidos (AA) indispensables, lo que puede aumentar la excreción de N y las emisiones de gases al medio ambiente (Møller et al., 2004; Dinuccio et al., 2008), limitando su aplicabilidad práctica (Cerisuelo et al., 2012).
El uso de AA cristalinos permite reducir el contenido de PB de los piensos, manteniendo el rendimiento productivo (Kerr et al., 2003). Sin embargo, los cerdos alimentados con piensos bajos en PB presentan frecuentemente canales con mayor contenido en grasa, independientemente de la suplementación de cantidades adicionales de AA (Kerr et al., 1995).
La mayoría de los estudios publicados muestran una disminución en el consumo medio diario (CMD) y una mejora en la eficiencia alimentaria con aumentos en el contenido energético del pienso (Quiniou y Noblet, 2012; Serrano et al., 2013).
Sin embargo, los beneficios potenciales de incrementar el contenido energético del pienso sobre la ganancia media diaria (GMD) de los cerdos en crecimiento/cebo son objeto de debate.
En este sentido, Cámara et al. (2014) observaron que un incremento del contenido energético del pienso aumentó linealmente la GMD de los cerdos, mientras que otros autores (Cerisuelo et al., 2012) no detectaron diferencias significativas.
Estas discrepancias pueden deberse a variaciones en la genética de los animales y de las materias primas utilizadas, así como en los niveles de energía y AA suministrados, lo que podría explicar las diferencias en los resultados observados.
Los efectos del contenido de EN en la dieta sobre la calidad de la canal y la carne de los cerdos no están claros.
Paiano et al. (2008) y Cámara et al. (2014) observaron que el aumento en la concentración de EN en la dieta aumentó la deposición de grasa en la canal en cerdos sacrificados con 120 kg de peso vivo.
Por el contrario, Kerr et al. (2003) y Apple et al. (2004) no detectaron diferencias en la calidad de la canal y de la carne en cerdos sacrificados a 110 y 106 kg de peso vivo, respectivamente.
Ensayo experimental
El objetivo de este trabajo fue estudiar la influencia del contenido de EN de piensos con niveles similares de PB sobre los rendimientos productivos y la calidad de la canal en cerdos Pietrain sacrificados a los 160 días de edad.
En total, se utilizaron 480 cerdos (67 ± 2,8 d de edad y 25,6 ± 2,9 kg de peso vivo) que fueron distribuidos en grupos de 10 cerdos por corral, en un total de 48 corrales (2,48 m x 4,13 m) en una granja comercial. Los cerdos tuvieron libre acceso a pienso y agua fresca durante todo el experimento.
Desde los 67 a los 95 días de edad (25,6 a 48,0 kg de peso vivo, de media), los cerdos fueron alimentados con una dieta común a base de cebada, trigo y harina de soja, que contenía 2.460 kcal EN/kg y 1,07% de Lys digestible.
A los 95 días de edad, los cerdos se pesaron individualmente y cada corral fue asignado al azar a uno de los cuatro tratamientos experimentales (n = 12), en base a la EN del pienso.
El programa de alimentación consistió en dos periodos experimentales (95 a 133 días y 134 a 160 días de edad), con variaciones en el contenido de EN (2.340, 2.390,2.450, 2.500 kcal/kg) del pienso, manteniendo constante la relación AA:EN (Tabla 1).
1Incluye cloruro sódico, carbonato cálcico, fosfato monocálcico y corrector, 2Según FEDNA (2019), 3Fibra neutro detergente
Tabla 1. Ingredientes y composición química de los piensos experimentales.
A medida que aumentó la concentración de EN de los piensos, se incrementó el nivel de inclusión de grasa a expensas del trigo, principalmente.
Para mantener un nivel similar de excreción de N, los piensos dentro de cada periodo fueron formulados con un contenido similar de PB (16,0% de 95 a 133 días y 15,4% de 133 a 160 días de edad), por lo que el nivel de inclusión de los AA cristalinos varió entre tratamientos.
La relación Lys:EN (g/Mcal) fue de 4,34 y 4,05 para los piensos suministrados de 95 a 133 días y de 133 a 160 días de edad, respectivamente. Todos los demás AA indispensables se formularon según el concepto de proteína ideal (FEDNA, 2019) y todos los piensos experimentales se presentaron en forma de gránulo.
Al finalizar el periodo experimental, los cerdos fueron trasladados al matadero para evaluar el efecto del tratamiento sobre la calidad de la canal.
Resultados
El aumento de la EN del pienso no tuvo efecto sobre el peso de los cerdos a los 133 días o a los 160 días de edad, con promedios de 81,3 y 103,8 kg de peso vivo, respectivamente (Tabla 2).
Sin embargo, durante ambos periodos experimentales, el aumento en el contenido energético de la dieta redujo el CMD (P < 0,001) y mejoró el índice de conversión (P < 0,001) linealmente, sin que la GMD o el consumo energético se vieran afectados.
El contenido en EN del pienso tuvo un efecto limitado sobre la calidad de la canal (Tabla 3). El único efecto observado fue en el rendimiento de paleta fresca, que varió cuadráticamente con valores superiores en los cerdos alimentados con 2.450 kcal EN/kg (P < 0,01).
En resumen, un aumento del 6,8% en la concentración de EN del pienso (de 2.340 a 2.500 kcal/kg) manteniendo constante la relación AA:EN mejoró el índice de conversión un 9,1%, pero no afectó a la GMD ni a la calidad de la canal de los cerdos.
1Desviación estándar (n = 12), 2L = lineal; Q = cuadrático, 3Consumo medio diario, 4Ganancia media diaria
Tabla 2. Efecto de la concentración energética del pienso sobre los rendimientos productivos de 95 a 160 días de edad.
1 Desviación estándar (n = 12), 2L = lineal; Q = cuadrático
Tabla 3. Efecto de la concentración energética del pienso sobre la calidad de la canal.
Por lo tanto, los resultados de este estudio sugieren que el incremento en el contenido de EN del pienso con el objetivo de mejorar el crecimiento y la calidad de la canal de los cerdos podría no estar justificado en todas las circunstancias.
Es importante tener en cuenta que los resultados obtenidos pueden variar en función de los ingredientes utilizados y el rango de EN considerado, ya que ambos factores pueden afectar directamente a los resultados productivos.