Un estudio elaborado por la Universidad de Wageningen, muestra la falta de competitividad de la industria avícola europea.
La industria avícola europea es cada vez menos capaz de competir con la producción de carne de aves de corral respecto a otras partes del mundo. De seguir por esta lína, la UE corre el riesgo de convertirse en un destino para la exportación de carne de aves más barata ya que los aranceles a la importación podrían reducirse aún más. Así lo afirma un estudio de la Universidad de Wageningen.
La industria avícola europea es cada vez menos capaz de competir con la producción de carne de aves de corral respecto a otras partes del mundo.
Destaca que hay países de fuera de la UE que son capaces de exportar hacia el mercado intracomunitario más barato que lo producido dentro de la UE pese a tener que pagar aranceles y costes de transporte. Según estiman, desde el año 2011 la diferencia de costes de producción entre la UE y los principales países exportadores hacia el mercado europeo (Brasil, Argentina, Ucrania y Tailandia) se ha incrementado debido a los altos costes de alimentación animal en la UE y por el tipo de cambio del euro.
El informe de la Universidad ha comparado la producción avícola de 9 países de la UE (Países Bajos, Francia, Reino Unido, Italia, España, Dinamarca, Polonia y Hungría) poniéndolos en comparación con los de EE.UU., Tailandia, Brasil, Argentina, Rusia y Ucrania.
Los costes de producción de la UE varían de € 1,56 y € 1,83 por kg peso canal. El promedio fue de € 1,73 por kilo. El costo adicional en la producción de la carne debido a la legislación europea adicional para el informe es de 4,8 céntimos por cada kg de peso vivo.
Los países estudiados fuera de la UE serán mucho menores costos de producción, en promedio, a un nivel de 71% de la escala europea. Fuera de Europa, no hay casi ningún interés por las medidas en el ámbito del medio ambiente y el bienestar animal. También se utilizan sustancias en la alimentación como harinas de origen animal que están prohibidas en la UE en los pollos de engorde
Fuente: Eurocarne