La industria avícola ha logrado mejoras dramáticas en la producción de proteína a través de la selección genética, la nutrición y el mejoramiento en las condiciones de cría, por lo cual, cada vez se hace más necesario proporcionar un ambiente adecuado a las aves que esté a la altura del desafío genético y productivo al que se ven enfrentadas durante su vida.
- Por tanto, aditivos como los fitobióticos se convierten en herramientas de necesidad para alcanzar los crecientes objetivos de la industria avícola.
En producciones comerciales en zonas de clima tropicales y subtropicales, se genera una alta sensación térmica en las aves, donde los ajustes comportamentales de los animales no son suficientes para contrarrestar el problema ambiental y mantener la homeostasis térmica, desencadenando así una condición conocida como “estrés calórico”.
La condición de estrés calórico en los animales produce efectos adversos, especialmente en detrimento de los parámetros productivos, que son ampliamente conocidos por los productores de pollo de engorde.
Fitobióticos como herramienta
Dentro del abanico de oportunidades que tienen los productores para hacer frente a los problemas que trae consigo la cría de pollo de engorde en ambientes de calor, los fitobióticos han ido ganando terreno en los últimos años. Para el entendimiento de esta herramienta alimenticia, los fitobióticos han sido definidos como:
Sustancias que son extraídas de plantas, comúnmente reconocidas por sus propiedades etno- farmacológicas, ya que sus compuestos químicos cuentan con propiedades antimicrobianas, antivirales y antioxidantes, entre otras, y que han demostrado ser beneficiosas para el mejoramiento del rendimiento productivo de las aves y particularmente para hacer frente a algunos desafíos ambientales como el estrés por calor.
Mantente al día con nuestros boletines
Reciba gratuitamente la revista en versión digital REGISTRO ACCEDA A
SU CUENTA ACCEDER ¿Ha perdido la contraseña?