Revisamos las proyecciones del USDA y el informe de FAO
¿Qué nos indican las proyecciones hasta el 2028 del USDA?
El Departamento de Agricultura de EE.UU. ha publicado recientemente un informe sobre las perspectivas agrícolas a largo plazo.
Teniendo en cuenta que en el máximo registrado 2012-2014 se habrían plantado más de 104 Mha de las 8 principales cosechas en EEUU (maíz, soja, trigo, algodón, sorgo, arroz, cebada y avena), se prevé que en la próxima década la superficie se podría mantener en torno a los 102 Mha, aunque se espera que los rendimientos podrían ayudar a mantener o aumentar la producción en la mayoría de cultivos.
Según este informe se espera que la producción de maíz de Estados Unidos continuará creciendo durante la próxima década, después de que las tensiones comerciales con China podrían tener consecuencias en las plantaciones de soja.
Además, se prevé que la producción de carne y el consumo de piensos podría aumentar. Así, se espera que la superficie plantada con maíz podría aumentar a corto plazo, aunque se estabilizaría en la segunda mitad del periodo (2023-2028) y se situaría en los 37 Mha en 2028/29, teniendo en cuenta que la demanda de soja proveniente de EE.UU. podría crecer de nuevo.
Por otra parte, y para la campaña 2018/19 se prevé que las exportaciones de maíz de EE.UU. podrían doblar las de Brasil, el siguiente mayor exportador, como consecuencia de una mayor demanda de este cereal para piensos.
La siembra de trigo en EEUU durante los próximos 10 años podría mantenerse en una media cercana a los 20 Mha, destacando unos niveles más elevados de plantaciones a corto plazo, debido a las persistentes tensiones comerciales que harían reducir el área sembrada con soja en EE.UU.
Mientras las exportaciones de trigo se mantendrían estables, como consecuencia de la creciente competencia de la región productora del Mar Negro, la situación actual entre EEUU y China, afectaría significativamente las plantaciones de soja, principalmente al inicio del período de análisis, donde se podrían perder casi 3 Mha de esta oleaginosa en EE.UU., destacando la menor siembra durante la campaña 2020/21 (33,3 Mha).
¿Y cuáles son los primeros análisis de las cosechas de la FAO?
Por otro lado, la FAO ha hecho unos primeros análisis respecto a las cosechas de cereales de 2019.
- La previsión inicial para la producción mundial de trigo en 2019 se sitúa en 757 Mt. A este nivel, suponiendo un incremento del 4% en comparación con 2018, pero aún se situaría por debajo del máximo histórico registrado en 2017.
La mayor parte del aumento anual previsto para 2019 se debe a los incrementos de producción esperados en Europa.
- En la UE, se estima que la superficie plantada de trigo aumente en un 3% y que la producción aumente en un 11% este año.
- Del mismo modo, en Rusia, se espera que el aumento proyectado de las siembras totales de trigo, junto con las condiciones climáticas favorables, impulse un incremento de la producción de 7 Mt, con lo que la cosecha a nivel nacional se situará en 79 Mt.
- En Ucrania se señalaron condiciones de los cultivos favorables, y se prevé que la producción de trigo aumente en un 8%, hasta los 26,5 Mt.
Por su lado, en América del Norte, se prevé que las siembras de trigo se habrían contraído en un 4% como consecuencia de unas condiciones de humedad excesiva durante la época de siembra, a pesar que se espera un incremento de las siembras de primavera.
Mejores condiciones para los cereales secundarios en Sudamérica
Hemisferio norte : las operaciones de siembra se iniciarán a partir de mayo
Hemisferio sur : En el caso de los cereales secundarios, la FAO espera que la recolección de las cosechas de 2019 en los países del hemisferio sur comience en los próximos meses
En América del Sur, debido al aumento de las plantaciones y a las buenas condiciones meteorológicas, se prevé que:
- En Argentina se recolecte una cosecha de maíz mayor en 2019, estimada en casi 50 Mt
- En Brasil, con la expansión prevista de las plantaciones para la cosecha de maíz, se espera que la producción de este cereal se recupere hasta alcanzar casi los 92 Mt en 2019.
Por el contrario, en otras latitudes, en Sudáfrica, las persistentes condiciones de sequedad habrían mermado las perspectivas de rendimientos, reflejando una disminución de la producción total de 11 Mt.