La proteína es una parte esencial en la formulación de cualquier dieta. El reto global de proporcionar cada vez más proteína a una población creciente está aún por resolverse; algo que se ha visto exacerbado por la retirada de los antibióticos del pienso de los animales.
La soja es la principal fuente de proteína para la industria de fabricación de piensos para alimentación animal en todo el mundo.
A menudo conocida como la “reina de las habas”, el haba de soja contiene más cantidad de proteína que otros productos, como la carne de cerdo, los huevos o la leche (WWF, 2017).
Conforme aumenta la demanda de productos de origen animal debido al crecimiento demográfico y el incremento de la riqueza, los proveedores de pienso y los ganaderos deben producir más, bajo regulaciones de seguridad cada vez más estrictas (FAO, 2002).
Además, hay cada vez más presión para producir proteína animal y productos alimentarios sin antibióticos, ya que existe relación entre el uso de antibióticos en el sector agro-ganadero y el incremento de las resistencias antimicrobianas, lo que supone un riesgo para la salud humana.
La mayoría de los antibióticos empleados en ganadería se administran en animales jóvenes, por lo que AgiliaTM se ha centrado en desarrollar una fuente de proteína diseñada específicamente para este periodo tan crítico en la vida del animal.
La importancia de la proteína
Todos los animales necesitan proteína para su crecimiento. Sin embargo, los requerimientos específicos de las dietas de los animales dependen de la especie y la fase de crecimiento.
El incremento significativo de la demanda global de productos de origen animal requerirán del suministro de cada vez mayor de proteína en la dieta, siendo necesario revisar continuamente las fuentes y sus alternativas. (FAO, 2002)
Los requerimientos de proteína descienden con la edad (FAO, 2002), haciendo que el contenido proteico de la dieta sea especialmente importante en las primeras etapas de la vida.
Es necesario reducir la dependencia de las fuentes tradicionales de proteína, pero factores como la oferta, disponibilidad, coste y valor nutricional deben tenerse en cuenta a la hora de buscar alternativas (Chisoro, 2015). AgiliaTM está afrontando este problema desde tres perspectivas.
Ingredientes innovadores
Continuamente, van apareciendo nuevas fuentes de proteína que empiezan a estar disponibles comercialmente en los mercados de todo el mundo.
Algunas fuentes nuevas de proteína incluyen los subproductos de la industria alimentaria y la harina de insectos. En Tabla 1 se muestran algunas de las fuentes de proteína animal utilizadas en la formulación de piensos para alimentación animal.
Alimentación funcional
Un ingrediente funcional es aquel que mejora el rendimiento y bienestar animal más allá de lo que pueda explicarse únicamente con nuestros conocimientos sobre la nutrición (Polo, 2015).
Los ingredientes funcionales para el pienso incluyen:
- Los probióticos
- Los prebióticos
- Los anticuerpos de huevo
- Los extractos de plantas
- Los derivados de levaduras
Los derivados de levaduras son beneficiosos a nivel nutricional para el tracto gastrointestinal, pero también dan soporte al sistema inmunitario, lo que es extremadamente importante en las primeras etapas de la vida de los animales jóvenes que se ven expuestos al desafío de los patógenos.
Perspectivas de futuro en la formulación de piensos
Paralelamente a los avances tecnológicos, los nutrólogos deben considerar un rango más amplio de factores, como:
- La calidad de los nutrientes,
- La disponibilidad de dichos nutrientes para el animal,
- Los costes para el productor.
Balancear los niveles de aminoácidos para satisfacer los requerimientos garantiza que los animales alcancen su máximo potencial de crecimiento sin sobrealimentarlos con ingredientes costosos que podrían verse desperdiciados al excretarse con las heces.
Conseguir más con el haba de soja
A pesar de su popularidad, el haba de soja es altamente variable y poco digestible, especialmente para animales jóvenes.
El equipo de AgiliaTM ha descubierto una forma única de procesar el haba de soja para:
- Maximizar el valor nutricional a través de un producto altamente digestible
- Lograr un ratio aminoácidos-energía más equilibrado
- Reducir la cantidad de factores antinutricionales
- Incrementar los beneficios funcionales de la soja al potenciar el sistema inmunitario
- Ofrecer a los productores mayores garantías en lo que respecta a bioseguridad
Conclusión
Los ganaderos buscan potenciar el crecimiento de sus animales desde el primer día de vida y los cambios en las regulaciones y las demandas de los consumidores están alterando la forma en la que los productores logran este objetivo.
La proteína es una parte esencial de la dieta, especialmente en el caso de animales jóvenes. Gracias a la innovación continuada de los ingredientes para piensos, se espera que los componentes de la dieta sean capaces de ofrecer algo más que sus propiedades nutricionales.
Algunos ingredientes también proporcionan beneficios funcionales, dando soporte al sistema inmunitario o potenciando las tasas de crecimiento.
Referencias disponibles bajo petición