Desde hace unos años, a partir de una alarma sanitaria iniciada por la detección de Aflatoxinas B1 en maíz (AFB1) y su metabolito AFM1 en la leche de vaca en algunas explotaciones de Andalucía, se ha extendido en todo el sector nacional de piensos compuestos e incluso por parte de los mismos ganaderos, pautas de empleo de “secuestrantes o adsorbentes de micotoxinas”.
Pretende este artículo describir los aspectos más relevantes de las mismas, referir un caso clínico de micotoxicosis en una explotación de cebo de terneros y hacer unas consideraciones sobre algunas cuestiones relevantes para la prevención de este tipo de problemas.
Aspectos más relevantes
Las micotoxinas son metabolitos secundarios de los hongos y son compuestos policetónicos resultantes de las reacciones de condensación que tienen lugar cuando, se interrumpe por alguna razón ambiental, la reducción de los grupos cetónicos durante la biosíntesis de los ácidos grasos (metabolitos primarios), realizada por los mohos.
Aflatoxina B1
Producida por hongos Aspergillus (flavus y parasiticus), hongos de “almacenamiento” con temperatura óptima a 25ºC. Ha sido la primera de las micotoxinas en fijar límites máximos en los alimentos, tanto de los animales como de los humanos.
La AFB1, presente en alimentos como maíz, sorgo, forrajes ensilados en condiciones no muy adecuadas etc, es transformada en el organismo de los animales que la ingieren, en un metabolito con menor poder tóxico, como es la Aflatoxina M1, que puede pasar a la leche de las hembras lecheras (vacas, cabras y ovejas).
La tasa de paso a leche en vacuno, de la AFB1 y medida del metabolito AFM1 está en torno al 0,15%. La UE fija que este metabolito AFM1 no podrá superar los 0,05 ppb en la leche de consumo humano.
Ocratoxina
Molécula cumarínica con peso molecular de 404 g/mol. Es un ácido débil que se absorbe en el estómago/abomaso, siendo reducida por la flora ruminal casi en su totalidad.
Deoxinivalenol (DON) o Vomitoxina
Producida por hongos Fusarium. Micotoxina de tipo tricoteceno de PM 293 g/mol, típica de flora de almacenamiento de los cereales. Es una micotoxina de las más polares, soluble en agua y solventes polares, que se suele emplear como “indicador” de contaminación general por Fusarium.
Es relevante que en el caso clínico que presentamos, el nivel de DON encontrado en el maíz (2.480) está por debajo del marcado por la UE y a pesar de ello, tanto los problemas padecidos en los terneros con este maíz contaminado ...