Para leer más contenidos de nutrinews-españa
Cuando hablamos de transferencia materna, pensamos en los nutrientes, las hormonas y los anticuerpos que son transferidos vía placentaria, en el calostro y en la leche durante la lactación en los mamíferos (Glezen, 2003).
Pero, hasta qué punto las sustancias no presentes en el cuerpo de la madre y de naturaleza difusible pueden ser transferidas produciendo un efecto directo sobre descendencia?
En múltiples estudios con diferentes especies se ha observado que ciertos compuestos propios de los ingredientes del pienso o suplementados a la dieta materna se pueden detectar en el líquido amniótico, calostro y/o leche (Tabla 1).
Métodos para detectar compuestos presentes en los ingredientes de los piensos
Hay diferentes métodos para detectar estos compuestos:
A partir de la Tabla 1 podemos concluir que los terpenos pueden pasar al líquido amniótico, al calostro o a la leche.
Se ha observado que este tipo de transferencia materna (diferente a la inmunológica o la nutricional) puede modificar las características de estos fluidos tanto organolépticamente, químicamente e incluso modificar su microbioma.
Cambios en la composición organoléptica
Como hemos observado previamente, algunos compuestos volátiles pasan la barrera placentaria –Tabla 1– y ser transferidos directamente a los fetos por vía sanguínea: