A comienzos de diciembre, FEFAC comunicó que, gracias a los datos aportados por los miembros de la Federación, se pudo estimar un descenso en la producción de pienso compuesto para ganado.
En comparación al 2022, la producción se redujo un 2%, lo que la sitúa en 144,3 millones de toneladas.
“El mercado de piensos de la UE en 2023 refleja las continuas presiones políticas y de gestión de crisis de mercado, así como una creciente demanda de proporcionar soluciones sostenibles de alimentación animal para abordar la dinámica del mercado y las consideraciones reglamentarias”, establece FEFAC.
En este sentido, se destaca que dichos factores se asocian o “responden” a un panorama que presenta tanto una emergencia climática, como una serie de enfermedades que amenazan el bienestar animal. Exactamente, se expone:
“Estas tendencias son una respuesta a los efectos adversos del cambio climático y las enfermedades animales en el suministro de materias primas, como sequías e inundaciones, y en la capacidad de producción animal, como la gripe aviar (IA) y la peste porcina africana (PPA)”.
De igual forma, se resalta que las políticas aplicadas en la Unión Europea, tanto en lo que se refiere a la reducción de gases de efecto invernadero, como a las regulaciones legales sobre las emisiones de nitratos, han tenido una influencia en el descenso de la producción.
La Federación compartió gráficas que reflejan la situación de cada país europeo involucrado, y las publicó abiertamente en su portal web. Además, realizó una breve explicación sobre los cambios en cada nación.
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