Los ácidos orgánicos en el agua de bebida reducen la susceptibilidad de los Broilers a las infecciones por Campylobacter
Campylobacter spp., en particular Campylobacter jejuni y Campylobacter coli, son considerados como la mayor causa de enfermedad por diarrea en el mundo.
Con casi 200.000 casos cada año, esta enfermedad de origen alimentario es la más reportada en la Unión Europea. Sin embargo, se cree que el número real de casos ronda los 9 millones. La EFSA estima que el coste que la campylobacteriosis supone para los sistemas de salud públicos así como su repercusión en pérdidas de productividad en la Unión Europea, cada año, unos 2.4 billones de euros.
La manipulación, preparado y consumo de la carne de pollo se considera como una importante ruta de infección pudiendo llegar a suponer el 20-30% de los casos de Campylobacteriosis descritos en el hombre, mientras que el 50-80 % de los casos puede atribuirse al propio animal (pollo o gallina) como reservorio de la misma.
Las autoridades europeas para la seguridad alimentaria declaran que el riesgo para los consumidores puede disminuir considerablemente mediante la reducción de la contaminación en lotes de animales vivos así como de sus canales en matadero.
Reduciendo la cantidad de Campylobacter en el intestino al sacrificio en 3 unidades logarítmicas, podría reducirse el riesgo para la salud pública hasta al menos un 90%.
La transmisión vertical no parece ser un factor de riesgo importante para la colonización de los pollitos por Campylobacter dado que la prevalencia de la misma en los huevos comerciales es muy baja o inexistente. Como los pollitos se consideran libres de Campylobacter el dia uno de vida.
En lotes de aves con más de 8 semanas de vida, la proporción de animales positivos puede disminuir como consecuencia probablemente de adquirir inmunidad. Tan pronto como el lote se infecta, Campylobacter se propaga muy rápido y virtualmente todos los animales se colonizan en menos de una semana. La inoculación de 100 ufc, es suficiente para colonizar un pollo.
Reduciendo la susceptibilidad (dosis mínima para infectar un ave), se necesitará una dosis de infección más alta para colonizar el tracto intestinal de los broilers y la bacteria se propagará más despacio por el grupo. Cuanto antes se infecte un pollo con Campylobacter, más difícil será reducir los niveles de colonización intestinal.
Campylobacter se protege así mismo en la gruesa capa mucosa del ciego y utiliza las glicoproteinas de la misma para propagarse. Conteos bacterianos de hasta 9 log10 no son raros en el ciego de los aves.
Las medidas de bioseguridad se consideran esenciales para prevenir la colonización de un lote por Campylobacter.
Una granja avícola convencional, moderna, con un buen mantenimiento y acceso limitado, debería considerarse biosegura. Si esta bioseguridad es estricta y consistentemente implementada, no pasará Campylobacter del exterior al interior, aunque esto es difícil de conseguir en la práctica.
Campylobacter puede sobrevivir en el agua durante semanas y se progaga en el ambiente de las granjas avícolas.
Los charcos de agua son lugares donde podemos encontrar Campylobacter sobre todo después de llover. Campylobacter puede sobrevivir en el agua durante semanas y persistir en las escorrentías de los pastos y en aguas residuales procedentes de una gran variedad de fuentes (como mataderos e incluso plantas de tratamiento de aguas residuales) , filtrándose eventualmente a la capa freática o pasando accidentalmente a los pozos u otras fuentes de agua. Estas fuentes de agua contaminada pueden ser vehículos de entrada de Campylobacter a las granjas de aves.
Los trabajadores de las granjas así como los visitantes (veterinarios, personal de mantenimiento, etc… ) son también un importante vehículo de entrada de Campylobacter a las granjas. El clareo que practican algunos granjeros también puede ser una oportunidad para la entrada de Campylobacter , dependiendo de las medidas higiénicas tomadas. El estrés que experimentan los animales durante este clareo puede también favorecer el establecimiento y la propagación de Campylobacter en los lotes de animales.
La suplementación con ácidos orgánicos en el agua de bebida puede ser útil para reducir el riesgo de infección y la propagación de Campylobacter dentro de un lote de pollos.
Los ácidos grasos de cadena corta y media tienen una fuerte actividad bactericida frente a Campylobacter.
La contaminación del agua de bebida, uno de los factores de riesgo para la colonización por Campylobacter , puede prevenirse completamente con la incorporación de ácidos orgánicos al agua de bebida. (no solo prevenir la colonización mediante la higienización del agua sino también mediante su efecto directo sobre la flora intestinal).
En tres publicaciones científicas diferentes se describió la siguiente experiencia:
A las 24 horas, se determinó el porcentaje de aves infectadas con Campylobacter. Los resultados de los tres experimentos se resumen en la figura 1.
En los tres experimentos, la dosis de inoculación de Campylobacter necesaria para la infección llegaba a ser significativamente superior después de la adición de ácidos orgánicos al pienso o al agua de bebida; reduciéndose por tanto la susceptibilidad a la infección.
Se determinó el efecto del agua acidificada sobre la propagación de Campylobacter entre broilers en ausencia de contacto directo entre ellos.
Las aves fueron alojadas en cuatro boxes diferentes, de nueve animales cada uno, con el objetivo de evitar el contacto directo entre ellos, e individualmente en jaulas a una distancia regular de (72.5 cm). Los broilers alojados en dos de los boxes recibieron agua de red mientras que los animales alojados en los otros dos restantes recibieron agua acidificada (a pH = 4 con Forticoat-NL®).
A los 12 días de vida, cinco pollos por box fueron inoculados con Campylobacter (5 log10 ufc por broiler). Los otros cuatro animales fueron monitorizados diariamente para ver si se contaminaban o no.
Para determinar el efecto del agua acidificada en condiciones de campo, cuatro lotes de pollitos de un día de vida fueron separados en dos naves idénticas.
En una de ellas, los broilers recibieron agua normal y en la otra, agua acidificada(Selko®4Health), repitiendo hasta tres veces la experiencia. Los conteos de Campylobacter en el agua de bebida fueron realizados al principio y al final de la línea de distribución del agua a las 3 y 4 semanas de vida. El agua de bebida permaneció negativa durante las cuatro repeticiones de la experiencia excepto para una muestra de agua al final de la línea en el lote 1 a las 4 semanas de vida.
El nivel de Campylobacter en el ciego de cinco broilers / nave fue determinado al clareo (31-35 dias de vida) y 7-9 días más tarde cuando se vació definitivamente la nave (38-44 dias de vida). El promedio de colonización cecal por Campylobacter por broiler alojado se muestra en la figura 3.
Durante todo el periodo de cebo, los niveles de Campylobácter de los lotes 3 y 4 fueron <1 log10 ufc por gramo de contenido cecal cuando se suministraba agua acidificada. En el grupo control solo el lote permaneció negativo a Campylobacter hasta el clareo. Cuando se vació por completo la nave, los cuatro lotes estaban infectados >5 log10 ufc Campylobacter por gramo de contenido cecal y solo dos lotes con el agua acidificada. El promedio de conteo de Campylobacter en ciego de los cuatro lotes fue de 3 log10 ufc por gramo, menor al final del cebo cuando el agua estaba acidificada.